(Gentileza: Mara De Doménico - colaboradora - Banco Nación; fotos: archivo HAP)
Banco Nación hizo un
gran esfuerzo durante todo el año por estar entre los primeros dos equipos y
tener la posibilidad de ascender directo a primera. De hecho, era el objetivo
principal y qué mejor motivación para un jugador que eso.
Tuvimos un buen comienzo de campeonato, nos
posicionamos entre los primeros tres equipos de la tabla y de ahí no bajamos.
Incluso, hasta los últimos cuatro partidos, todavía no se sabía quien iba a
ascender. Nunca perdimos las esperanzas y partido a partido peleamos por el
campeonato. Si hay algo que caracteriza a este club, a cada uno de los miembros
que conformamos el hockey de Banco Nación, es el no bajar los brazos incluso en
los momentos más duros. Desde la subcomisión en su gran empeño para que
tengamos nuestra propia cancha, hasta las menores entrenando en el colegio La
Salle en un patio de escuela. Absolutamente todos han hecho desde su lugar
algún tipo de esfuerzo para estar donde hoy estamos.
Este año no se pudo
cumplir en primera división el objetivo deportivo del ascenso. A mitad de
campeonato sufrimos algunos altibajos ya que no logramos cerrar los partidos
como esperábamos. Tuvimos muchos empates y eso no nos permitió seguir sumando
de forma ideal para quedar definitivamente entre los primeros. Las
oportunidades las tuvimos y siempre dependió de nosotras, incluso hasta el
último minuto de los Play Off.
Los Play Off eran como
un premio consuelo, pero así y todo, Banco Nación se levantó nuevamente y los
encaró de la mejor manera que pudo; poniéndole garra, esfuerzo y compromiso
para demostrar que era capaz de superarse. Entrenamos cada viernes en Quilmes
para llegar a dar lo mejor de cada una y poder alcanzar ese sueño que
mantuvimos durante todo el año.
A pesar de no haber
ascendido rescato el aprendizaje y crecimiento que nos ha dejado todo este
proceso que vivimos. Estuvimos muy cerca, como en tantos otros partidos, pero
necesitábamos ganar o ganar; y en estos Play Off, Banco Nación ganó. Ganó en
seguridad, en actitud, en compañerismo, espíritu de juego y unión de familia.
Para lamento nuestro, los partidos se definen en el arco contrario y todavía a
Banco Nación le falta tener más efectividad en jugadas decisivas. Liceo Naval
fue un rival cauto, que se paró bien en la cancha y no arriesgó demasiado. En
el primer partido nosotras no pudimos convertir durante el primer tiempo que
fue cuando tuvimos mayor control ni tampoco ampliar la diferencia de un gol en la
segunda parte del partido definitorio. En este último logramos tener cortos a
favor y marcar en uno de ellos, pero no fue suficiente. Liceo Naval aprovechó
su ventaja deportiva ofreciendo por momentos un partido equilibrado y fue así
que consiguieron mantener su categoría.
Como todo jugador, es
difícil no entristecerse y sentir que fue una derrota pero hay que pensar para
adelante; que este deporte tiene revancha y al equipo le quedan cosas por
aprender y mejorar. Por ello, luego del receso esperamos continuar desde donde
dejamos. No va a ser un comenzar de cero sino seguir trabajando por lo que
todos queremos, estar en la A. (Mara De Doménico)