(Fuente: "Hockey Mobile" www.hockeymobile.com.ar)
Tomás Landa, jugador de San Martín, y Agueda Moroni Melgarejo, cordobesa de La Tablada, le contaron a Hockey Mobile como fue la experiencia en el segundo Campus de Lombi Project en el que pasaron cuatro días perfeccionando y aprendiendo con un staff de profesionales de primer nivel. “Fue una de las mejores experiencias de mi vida” dijo Agui y Tomás agregó: “Las técnicas explicadas por verdaderos cracks es un lujo”.
Durante las vacaciones de invierno se llevó a cabo el segundo Campus de LombiProject y Hockey Mobile habló con dos chicos que participaron del mismo y contaron como fue la experiencia a lo largo de los cuatro días que duró.
Tomás Landa tiene 17 años, juega en la 5ta división de San Martín y ya había participado del primer Campus en febrero. “El hockey es lo que me apasiona e ir al Campus en vez de quedarme en casa en vacaciones sin hacer nada lo demuestra”.
Agueda Moroni Melgarejo, es cordobesa, juega en La Tablada y tiene 16 años. Viajó desde Córdoba Capital para pasar los 4 días en el Club Hacoaj junto a Pablo Lombi y su staff. “El campus fue una de las mejores experiencias de mi vida porque pase cuatro días haciendo el deporte que más me gusta y relacionándome con gente que siente lo mismo por el hockey, además de todo lo que aprendí”.
“La verdad es que todo me fascinó. La forma en que se daban los entrenamientos, las charlas que tuvimos de nutrición, kinesiologia, y la buena onda que tenían todos los del Staff” cuenta Agueda y Tomás coincide :” Las charlas que nos dieron de Rcp, de nutrición, de como enfrentar una lesión o prevenirla, fueron muy interesantes y nos pueden ayudar muchísimo”
En el Campus los chicos tienen la posibilidad de perfeccionarse con los mejores, y aprender de jugadores del seleccionado. “Las técnicas nuevas explicadas por verdaderos cracks es un lujo la verdad. Que Acha (Gonzalo Peillat) nos explique la arrastrada por ejemplo, o Dona (Mariana Rossi) a quitar, y todos la verdad, que es un privilegio. Fue increíble” dice Tomás. Agui además cuenta que “de este campus me lleve un montón de nuevos conocimientos, tanto técnicos, como formas de pensar dentro de la cancha. Aprendí mucho de la importancia de la postura y del entrenamiento fuera de la cancha (gimnasio, fisico), y la verdad es increíble pasar cuatro días pensando y aprendiendo solo hockey”.
Sobre la convivencia y la experiencia compartida con los demás, los dos, que se quedaron a dormir en el lugar, tuvieron sólo palabras positivas: “La convivencia es muy divertida porque charlás de como es el hockey en cada club o lugar, y te haces nuevos amigos. Te cuentan experiencias y vos les contas a ellos” resume Agui y Tomás se suma: “La convivencia con otros chicos es muy buena, más si te quedas a dormir, ya que comés, dormís con ellos, y te llevas muchos amigos nuevos”.
